La Laken Riley Act podría cambiar la manera en que se trata a los inmigrantes en Estados Unidos. Si se aprueba, obligaría al gobierno a detener a inmigrantes por delitos menores, como un robo menor, incluso antes de que se demuestre su culpabilidad. Los defensores de la ley dicen que ayudará a reducir el crimen, pero los críticos advierten que podría separar familias, afectar a los niños y provocar deportaciones injustas.
La ley también daría más poder a las autoridades estatales para desafiar las reglas de inmigración federal, lo que podría llevar a un trato desigual y abuso de autoridad. Los críticos temen que la policía pueda usar errores pequeños como excusa para detener y deportar a inmigrantes, afectando de manera injusta a las familias más vulnerables.
Además, preocupa el impacto humano de esta ley. Detener a niños y familias por infracciones menores se considera cruel y contrario a los valores de justicia y compasión. Se pide a los legisladores que piensen en cómo estos cambios podrían dañar a las familias y fomentar un trato injusto hacia las personas.
