Establecida por ley en 1986, esta entidad opera como una subdivisión política independiente dedicada exclusivamente al encarcelamiento de jóvenes. Esta designación protege a Ware de la responsabilidad en incidentes trágicos, como los recientes suicidios de dos personas. Los informes indican que Ware violó varias regulaciones, incluidos tiempos de detención excesivos para niños y una supervisión inadecuada. A pesar de esto, el estado de Luisiana no tomó medidas contra Ware ni su administración, y el Departamento de Servicios para Niños y Familias encontró señales de un posible encubrimiento, incluida evidencia en video de mala conducta de los guardias. En 2022, hubo 64 intentos de suicidio por parte de niños en las instalaciones de Ware. El Centro Juvenil Ware en la parroquia de Red River fue destacado en un informe de investigación de 2022 del New York Times, que alegó abuso sistemático de niñas en la instalación. Recientemente, el acuerdo financiero del estado con Ware ha sido revivido por Kenny Loftin, quien ahora es el jefe de la Oficina de Justicia Juvenil, habiendo servido anteriormente como director de Ware durante mucho tiempo. Si bien Loftin no fue acusado de ningún delito en el informe del New York Times, algunos de los abusos denunciados ocurrieron durante su mandato. Los jueces que manejan casos juveniles de estas parroquias designan a tres miembros de la junta, mientras que los alguaciles y jefes de policía designan a cuatro; cada una de las seis parroquias involucradas tiene un representante, y los fiscales de distrito locales también reciben un puesto.
